¿Sabías que cuando consumes hortalizas ecológicas, sin aditivos ni pesticidas, estás cuidando tu salud y estás preservándote de múltiples enfermedades? Descubre cómo crearte un botiquín natural en casa.
Descripción: La Lactuca sativa, comúnmente llamada lechuga, es una planta anual propia de regiones semi templadas. Se consume normalmente cruda como ingrediente para ensaladas. Existen diferentes variedades: Batavia (verde rojizo), Mantecosa (similar a la iceberg pero más pequeña), Verde Maravilla (verde rojizo en su extremidad), Iceberg(forma redonda y hojas grandes y crujientes), Roble (verde y marrón, de forma ondulada), Rosso (rizada y de color rojizo con un sabor más amargo), Romana (verde oscura), Cogollos (de tamaño pequeño parecido a la col), Red Bowl (de hoja suelta. La tenemos en Huertea y es deliciosa). Propiedades: La lechuga aporta muy pocas calorías y un alto contenido en agua. Por su riqueza en fibra produce una sensación de saciedad después de haberla comido (además de un suave efecto laxante). Estos tres argumentos, la convierte en un alimento muy indicado en dietas de control de peso. Se puede destacar la presencia de folatos (ayuda en la producción de glóbulos rojos y blancos y la formación de anticuerpos), provitamina A o beta-caroteno, y vitaminas C y E. La lechuga romana cultivada al aire libre es la variedad más rica en vitaminas, mientras que la iceberg es la que menor cantidad de vitamina C presenta. La propiedad principal de la lechuga es su efecto sedante natural y anestésicas. Se utilizaba desde la edad media para calmar dolores en general (sobretodo el de cabeza) y facilitar el sueño. Por ejemplo, los soldados romanos los llevaban con ellos para aliviar el dolor después del combate. El ácido fólico de la lechuga ayuda a las mujeres embarazadas a prevenir la espina bífida y la alteración en el desarrollo del sistema nervioso del feto gracias a esta vitamina imprescindible en el proceso de división y multiplicación celular en los primeros meses de gestación. Curiosidad – La lechuga y tu vida sexual: Experimentos han sido llevados a cabo por la universidad de California y demuestra que la lechuga estimula la fertilidad, la libido y ayuda a tratar problemas de eyaculación precoz.